Bilbao acoge hoy la tercera parada de la gira en la que están inmersos tres veteranos del rock estatal, Barricada, Rosendo y Aurora Beltrán (ex Tahures Zurdos). Toda una mágnifica noche de rock and roll en la que no faltarán las sorpresas
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Andrés Portero
EL pabellón municipal de La Casilla acoge hoy, a partir de las 21.00 horas horas, el tercer concierto de la gira Otra noche sin dormir, en la que tres veteranos del mejor rock en castellano de las últimas décadas -los navarros Barricada y Aurora Beltrán y el madrileño Rosendo-, unen sus fuerzas durante tres largas horas, en las que compartirán e intercambiarán repertorios. Se trata de una oportunidad perfecta para escuchar clásicos como Una noche de amor, Agradecido, Qué desilusión, No hay tregua, Okupación o Lentejuelas. Una magnífica noche de rock´n´roll que cuenta con el patrocinio de DEIA.
Vieron los buenos resultados de la unión temporal de Fito y Andrés Calamaro en 2007, y se liaron la manta a la cabeza. Colegas desde hace años tras compartir horas y horas de carretera, escenarios de todo tipo, canciones y sudor, Barricada y Rosendo pusieron en marcha la gira Otra noche sin dormir, a la que se unió posteriormente Aurora Beltrán, ex Tahures Zurdos y que acaba de saltar a la arena en solitario.
"Hasta ahora, este tipo de giras no eran muy habituales, pero ahí estuvieron Fito y Calamaro el año pasado", asegura a DEIA Boni, guitarrista y segunda voz de Barricada. "Como suele decir el Drogas, esto no va a ser una competición y tratar de llevar más luces que nadie o un escenario más grande que el resto. Es una especie de fiesta compartida con grandes amigos", asegura el músico de la Txantrea.
"Todo surgió porque Rosendo cambió de oficina y se fue a la nuestra, a Get In. Ahí nace todo. La gira nos apetecía a todos porque nos une una amistad de años. Meter a Aurora fue para darle color femenino. Además, es muy grande", asegura Boni, quien se deshace en elogios sobre Rosendo, un clásico de la escena musical estatal que ya mostró su valía en esto del rock urbano al frente de Leño con clásicos como Entre las cejas o El tren. "Rosendo es como nuestro padre. El de casi todos. Y Aurora es como nuestra hermana. La conocemos de toda la vida, es un personaje mítico en Iruña y siempre ha estado muy cerca de nuestra historia. Fue una sugerencia de Rosendo, que ha colaborado con ella", apostilla Boni.
Un tour escaso de fechas
Los compromisos particulares mandan
La gira arrancó en Donostia el 4 de abril y recaló en la localidad catalana de L´Hospitalet el pasado 19. La fecha de hoy en Bilbao es, pues, la tercera de este tour restringido de conciertos, escaso en fechas, dado que cada uno de los artistas prosigue con sus particulares conciertos en solitario, pero sobrante en intensidad rockera. El resto de fechas confirmadas son Zaragoza y Elche este mes: Iruña, el 28 de junio, en el Pabellón Anaitasuna; San Pedro del Pinatar (Murcia), el 12 de julio; y Madrid, como cierre de gira el 26 de septiembre. Por su parte, Gasteiz verá pasar la gira durante las fiestas de La Blanca.
Además de las cerca de cuatro largas horas de espectáculo, Otra noche sin dormir destaca por la camaradería que demuestran sus participantes, que comparten canciones propias y ajenas a lo largo de la velada. Los aficionados podrán comprobar en primer lugar el estado actual de forma de Aurora Beltrán, que saldrá al escenario de La Casilla en solitario, en formato acústico, y actuará durante casi media hora. En el último tema se le unirá Rosendo, antes de que el madrileño inicie su concierto, acompañado de Rafa J. Vegas, al bajo, y Mariano Montero, a la batería.
Tras concluir su parte, Rosendo compartirá tres canciones con Aurora, Boni y Alfredo, en formato acústico. Después, llegará el set eléctrico de Barricada, durante casi otros 90 minutos. Y, finalmente, un bloque común y compartido, de algo más de media hora, en el que se juntan las bandas, se alternan las voces solistas y llega a haber dos baterías tocando juntas.
Todo ello aderezado con algunas sorpresas en el apartado escenográfico, hasta conformar un espectáculo que resiste cualquier examen rockero. De Una noche de amor a Agradecido, Qué desilusión, No hay tregua, Okupación, Manifiesta deprimente, Pídemelo otra vez, Muerte ven, Pan de higo, Loco por incordiar, Flojos de pantalón, Contra la pared, Oveja negra, Deja que esto no acabe nunca, A toda velocidad, Animal caliente, Lentejuelas y hasta el mítico Maneras de vivir, de Leño, como despedida.
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